En pleno 2020 nadie duda de la garantía que supone comprar por Internet, por lo que este hábito es algo cada vez más extendido entre la población debido a la comodidad que supone. Durante los últimos meses, este tipo de consumo se ha visto beneficiado –si es que puede decirse que la COVID-19 haya beneficiado a alguien– por la pandemia y las medidas restrictivas.
Según datos del informe Shoppin Index de Salesforce, durante el segundo trimestre de este año, coincidiendo con la etapa de confinamiento, el incremento de las ventas online en España ascendió al 67%.
Si bien es cierto que es una práctica habitual, segura y con diversas ventajas, el comercio electrónico no está del todo exento del peligro de fraude debido a la suplantación de identidad. Atendiendo a esta preocupación que en ocasiones genera la realización de transacciones online, BBVA ha presentado su nueva familia de tarjetas Aqua.
Se trata de tarjetas en las que no figuran ni la numeración, ni la fecha de caducidad, ni el CVV (los 3 dígitos que encontramos en el reverso). Precisamente son estos tres datos los que, en primera instancia, requiere cualquier plataforma de pago en Internet. Normalmente deben ser consultados en la tarjeta –aunque algunos clientes asiduos del ecommerce los conocen de memoria–, por lo que la posesión del plástico es lo que nos permite iniciar una transacción online.
Sin embargo, con la intención de evitar posibles fraudes si el cliente sufre un robo o extravío de la tarjeta, BBVA apuesta por la banca online para reforzar la seguridad. Es por esto que la utilización de las tarjetas Aqua para el comercio electrónico requerirá el acceso a la app de la entidad bancaria, en la que se podrán consultar los números que no aparecen en ellas. Además, el CVV no será siempre el mismo, sino que será dinámico. Es decir, la aplicación generará distintas combinaciones de tres dígitos con una validez de 5 minutos.
Este lanzamiento, que estará disponible a finales del mes de octubre, ofrece tres modalidades de tarjeta, todas ellas fabricadas con plástico reciclado: crédito, débito y prepago. Además, también permite el pago a través del móvil en comercios físicos, ya que el 12% de las transacciones con tarjeta por parte de clientes BBVA se realizan ya a través del smartphone.
Apuesta por la banca online para una «nueva experiencia»
Las tarjetas Aqua llegan en un momento en el que esta modalidad de pago se está imponiendo frente al efectivo, debido a las precauciones que la COVID-19 nos obliga a tomar, que siempre son pocas. Tal y como explicábamos en este artículo, los datos acumulados de los meses de marzo a mayo de este 2020 en España reflejan que el incremento del pago con tarjeta ha sido del 15% (del 38,5% al 54,1%).
BBVA ya había sido la entidad financiera española pionera en aplicar para sus usuarios la normativa europea sobre seguridad de pagos (PSD2), que exige una doble autenticación del cliente para realizar transacciones online. Ahora vuelve a tomar la delantera con la utilización de la tecnología cloud y de «algoritmos criptográficos avanzados» para lograr esta funcionalidad de las nuevas tarjetas Aqua.
Gonzalo Rodríguez, director de Desarrollo de Negocio de BBVA en España, explica que esta iniciativa pretende ir más allá del producto y convertirse en «una nueva experiencia» para sus clientes. «Cuando accedan a la app encontrarán, en primer lugar, aquellos servicios más utilizados para facilitarles las gestiones, tendrán un mayor control de sus gastos, podrán elegir la modalidad de pago que deseen y contar con mayor seguridad en sus compras online, ya que el número y el CVV no aparecen en las tarjetas», destaca Rodríguez.
Este nuevo proyecto nace de un estudio que BBVA llevó a cabo durante el pasado mes de diciembre, en el que entrevistó a un millar de sus clientes en España en relación al uso de las tarjetas y la banca online. Los resultados que arrojó esta investigación revelaron que la seguridad, la planificación y el control de gastos y productos, así como la posibilidad de realizar un gran número de operaciones a través del móvil son los puntos más valorados por los usuarios.
La tarjeta Aqua será gratuita para los clientes vinculados al BBVA y también será otorgada a aquellos nuevos clientes que se den de alta mediante los canales digitales. En el caso de personas que no cumplan las condiciones de vinculación del banco, Aqua tendrá un coste de 35 euros al año en su modalidad de débito y de 42 euros anuales en el formato de crédito.