Google ha presentado Bard, una IA conversacional con la que pretenden hacer frente a ChatGPT de OpenAI y Microsoft. De momento, la herramienta se encuentra en fase de pruebas, por lo que solo pueden probarla algunos privilegiados, pero pronto estará disponible para todos los usuarios.
“Hemos estado trabajando en una IA experimental de conversación, basada en LaMDA, a la que hemos bautizado como Bard. Hoy, vamos un paso más allá compartiéndola con un grupo de testers de confianza, que se encargarán de probarla antes de ponerla a disposición del público en las próximas semanas”, explican en una publicación de su blog.
La guerra por la IA
La guerra que mantienen Microsoft y Google por hacerse con la gallina de los huevos de oro del momento es de sobra conocida. Y esa gallina no es otra que la inteligencia artificial. Desde el lanzamiento de ChatGPT, Google se ha visto contra las cuerdas, ya que supuso una revolución en la forma de realizar consultas en Internet y, por ende, una amenaza para su largo reinado en este territorio.
Tanto es así que, en diciembre, los de Mountain View activaron un “código rojo” al ver que la popularidad de ChatGPT no hacía más que crecer. El mes pasado, Google anunció despidos masivos, siguiendo los pasos de otros muchos gigantes tecnológicos. Y una de las principales razones de ello fue que querían centrarse en sus prioridades actuales.
Una de esas prioridades, sin lugar a dudas, es la inteligencia artificial. Ante un rival tan formidable como ChatGPT, se veían en la necesidad de ponerse al día en este ámbito y, para ello, decidieron sacrificar a alrededor de 12.000 empleados de otros sectores menos importantes en este momento.
La gota que colmó el vaso para la gran G fue el rumor de que Microsoft estaba planeando integrar su bot conversacional en su buscador Bing, lo que podría hacer que muchos usuarios dejaran de recurrir a Google como su principal fuente de información.
Y al final, sus temores han resultado ser ciertos. Y es que un usuario (Owen Yin) publicó un tuit en el que mostraba una nueva versión de Bing en la que se podían realizar consultas a ChatGPT directamente. No sabemos si se debe a un error o a otra causa, pero esta opción solo estuvo disponible durante un tiempo limitado. El usuario no realizó ninguna acción especial, tan solo tenía Bing habilitado como su buscador predeterminado y, al abrir el navegador, se encontró por sorpresa con esa funcionalidad.
Bing's ChatGPT integration just appeared for me. Replaces the search bar with a composer for natural-language questions pic.twitter.com/NxZ0k9O92C
— Owen Yin (@Owen_Yin) February 3, 2023
Y a eso, además, hay que sumarle que ChatGPT ha logrado un hito sin precedentes: alcanzar los 100 millones de usuarios en tan solo dos meses. Para comprender la magnitud de esta hazaña podemos compararlo con TikTok o Instagram, que tardaron en conseguirlo nueve meses y casi dos años respectivamente.
El contrataque de Google
Por todo esto, Google ha decidido lanzar Bard, una nueva IA conversacional basada en LaMDA. Por si no lo recuerdas, esta última es la misma que desató la polémica cuando uno de sus exempleados afirmó que se trataba de un ser consciente. Pues bien, ahora el gigante tecnológico la ha rebautizado como Bard y dicen que posee capacidades que superan a ChatGPT.
Las consultas sobre temas de actualidad es uno de esos aspectos en los que flaquea la herramienta de OpenAI. Esta no está conectada a Internet, sino que ha sido entrenada con millones de datos que le sirven para generar sus respuestas. Por ello, no es capaz de darnos información en tiempo real, sino que sus conocimientos no van más allá de algún punto de 2021. Google, por el contrario, pretende resolver esto con Bard, que sí ofrece respuestas actualizadas, ya que se nutre de Internet.
“El objetivo de Bard es combinar la base de conocimientos del mundo con la potencia, inteligencia y creatividad de nuestros grandes modelos lingüísticos. Bard toma información de internet y la emplea para ofrecer respuestas actuales y de alta calidad,” afirma Sundar Pichai, CEO de la compañía.
Al igual que Microsoft, Google también pretende integrar esta IA en su buscador. La herramienta puede resultarle útil a algunos usuarios que intenten “responder preguntas que no tienen una sola respuesta”. Así, por ejemplo, se podrán realizar consultas más complejas, como “¿qué es más fácil, aprender a tocar el piano o la guitarra? ¿Y cuánta práctica requiere cada uno de estos instrumentos?” o “¿cuáles son los últimos descubrimientos del telescopio James Webb que puedo explicarle a un niño de 9 años?”
Bard aún se encuentra en fase de pruebas, por lo que, de momento, tan solo pueden utilizarla “un grupo de testers” de su confianza. No sabemos exactamente cuándo se lanzará definitivamente, pero los de Mountain View afirman que estará disponible en las próximas semanas. El plan de la compañía es lanzarlo inicialmente con una versión de modelo reducido de LaMDA, ya que requiere una potencia de cálculo mucho menor y, por lo tanto, podría llegar a un mayor número de usuarios más fácilmente.
