La pandemia ha obligado a la población a encontrar nuevos modelos de trabajo, socialización o diversión. Algunas de las rutinas adoptadas durante los primeros meses de la crisis se han mantenido en el tiempo, como el teletrabajo o el auge del comercio electrónico.
Para analizar estos nuevos comportamientos, Samsung ha elaborado junto a la consultora IPSOS, ‘Vida descentralizada: de los hábitos del confinamiento a una nueva forma de vivir’, un estudio en el que han participado 10.800 personas de diferentes países europeos, entre los que se encuentran España, Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Italia, Polonia, Suecia y Noruega.
Según el estudio, la actividad más realizada por los europeos durante el confinamiento y desde el comienzo de la pandemia han sido las videollamadas con amigos y familia. Esto es así para el 37% de los encuestados, por encima de actividades como «cocinar y pasar tiempo en la cocina» (29%), «entrenar» (22%), «decorar o hacer mejoras en casa» (19%), «iniciar un nuevo hobby» (17%), o «aprender algo nuevo» (13%).
El 50% seguirá socializando virtualmente cuando se levanten las restricciones
El estudio de Samsung e IPSOS apunta que la tecnología ha jugado un papel clave para la vida de las personas desde que comenzase la pandemia. Este tipo de herramientas han permitido que el 58% de los europeos haya podido mantener el contacto con la familia y los seres queridos.
Sin embargo, esta circunstancia no ha sido meramente puntual, ya que el 50% de los encuestados asegura que no solamente hizo más uso de las videollamadas durante el confinamiento sino que seguirá haciéndolo en el futuro. Así, la mitad de los encuestados afirma que continuará socializando de manera virtual incluso cuando se levanten todas las restricciones.
Por el contrario, las reuniones presenciales aún generan inseguridad en los encuestados, ya que el 53% reconsideraría asistir a una reunión con amigos mientras que, en el ámbito laboral, lo haría un 41% en el caso de que pudiese sustituirse por un encuentro online.
Invertir en hogares que mejoren el bienestar mental
Los hogares fueron durante un periodo de tiempo el único espacio en el que las personas pasaban su tiempo, por lo que la comodidad se volvió indispensable. Así, el estudio revela que 1 de cada 3 personas prioriza actualmente la compra de casas que mejoren su bienestar mental por encima de la funcionalidad. Para el 75% de los españoles, el hogar se convirtió en un «espacio seguro» durante tres meses y aún lo sigue siendo.
Esta situación ha derivado en que las personas se replanteen la forma en que proyectan su personalidad, su estatus social y sus valores personales a través de sus hogares. En este sentido, a raíz de la pandemia, el 48% de los europeos consultados se muestra partidario de destinar su dinero a dispositivos o aparatos tecnológicos inteligentes para el hogar, muy por encima de comprar ropa u otro tipo de accesorios.
De la misma manera, de media el 25% de los encuestados aseguró que el dinero sobrante o aquel que solían destinar a caprichos o compras personales, ahora lo dedicarían a aparatos de tecnología inteligente en primer lugar. La respuesta fue particularmente alta en España e Italia, los países más afectados durante la primera ola de la COVID-19, con un 33%. Por el contrario, en países como Noruega tan solo el 19% eligió esta opción.
La segunda opción para los europeos, según el estudio de Samsung e IPSOS, fue la compra de electrodomésticos inteligentes, elegida por un 13%.
En cuanto a las decisiones de compra previstas para los próximos 12 meses, el estudio también revela un cambio de prioridades entre la población. Así, el 52% de los europeos afirma que es probable que compren un electrodoméstico para la casa, mientras que para el 43% es probable que compren dispositivos tecnológicos para entrenar en casa, altavoces inteligentes o televisores.
