Que la transformación digital se ha acelerado con la pandemia de la COVID-19 es un hecho. Pero estos cambios no son solo un reto logístico y de procesos. Son, ante todo, un cambio de mentalidad que tiene especial importancia en el caso de los líderes de las empresas, y que pone a las personas (los clientes, los empleados) en el centro de las decisiones. Los CEOs ahora son más conscientes del impacto que sus empresas tienen en la sociedad y en las vidas de la gente, y actúan en consecuencia.
Esa es una de las claves del informe CEO Outlook 2020: COVID-19 que KPMG acaba de presentar. Un documento que tiene como fuente una encuesta a 315 consejeros delegados de todo el mundo realizada entre julio y agosto de 2020, y que se compara con las entrevistas realizadas a 1300 directivos a principios de año. Y estos son los cambios más importantes:
- Líderes y empresas con un propósito: ahora los directivos están más vinculados al propósito de su organización y a la función positiva en la sociedad que este representa, y sienten más responsabilidad por impulsar cambios sociales, como, por ejemplo, medidas contra el racismo. En este aspecto, también ha influido el movimiento “Black Lives Matter”: el 81% de los encuestados ha anunciado o prepara medidas para combatir el racismo en la contratación de personal.
- Transformación digital acelerada para favorecer el crecimiento… y para sobrevivir: un 30% de los encuestados asegura que sus empresas han adelantado años en este proceso respecto a sus previsiones antes de la pandemia. Y esto es muy importante, porque en un escenario en el que un gran número de empresas es pesimista respecto a la situación de la economía en los próximos años, el crecimiento vendrá de la mano de la capacidad para digitalizarse y adaptarse a los nuevos hábitos de consumo. Según el informe, las empresas se enfrentan ahora al reto de mantener los logros conseguidos en este aspecto, y sólo podrán hacerlo si, además del aspecto tecnológico, tienen en cuenta el aspecto humano, ayudando a sus empleados a aumentar sus capacidades en el nuevo entorno digital.
- Las empresas como agentes de cambio positivo: los criterios ESG (siglas de enviromental, social and governance) guían las decisiones de transformación de unos líderes cada vez más comprometidos, que durante la crisis se han hecho más conscientes del impacto social positivo que pueden producir sus compañías, sin olvidar problemas como el cambio climático. En este sentido, son muy interesantes las declaraciones de Ramón Pueyo, Socio responsable de Sostenibilidad y Buen Gobierno de KPMG en España: “La pandemia ofrece a los ciudadanos la oportunidad de evaluar con mayor criterio la autenticidad del propósito y de los valores de las compañías. Son muchas las empresas que están dando muestras de su compromiso social en estos momentos difíciles, pero su reputación dependerá de si mantienen ese compromiso a largo plazo. Los CEOs han comprendido que la inclusión de criterios ESG en la estrategia corporativa se ha convertido en un imperativo para sus grupos de interés, ya sean empleados, clientes, inversores o proveedores”.
- El talento en el centro del negocio: con respecto a principios de año, la precepción de riesgos de los CEOs ha cambiado radicalmente, y en el puesto número 1 se han colocado aquellos riesgos relacionados con las personas que integran la compañía. El 21% de los encuestados considera que el gran reto para conseguir crecer es mantener a los empleados clave, aumentar la productividad de los equipos y atraer el talento. También ha aumentado la preocupación de los líderes por construir una cadena de suministros eficiente en todos los aspectos.
Cambios prácticos que YA son reales:
- El teletrabajo es la gran tendencia de 2020. Eso significa que personas de cualquier parte del mundo pueden trabajar en empresas ubicadas en el otro rincón del planeta. Y la gestión de los espacios de trabajo y las oficinas puede ser ahora mucho más eficiente.
- Más velocidad para satisfacer a sus clientes: el 67% de los entrevistados se han visto obligados a reestructurar su cadena de suministros debido a la ruptura provocada por la pandemia, y a volverse más eficaces a la hora de satisfacer la demanda.
- Las empresas se han hecho más adaptables: la rapidez de los cambios provocados por la COVID-19 ha obligado a las empresas a crear mecanismo para adaptarse más rápidamente a cambios radicales. Ahora los modelos operativos son más ágiles, y para mejorar aún más en este sentido los CEOs deberán emplear sus inversiones en tecnología (tanto en equipos como en empleados con habilidades en campos tecnológicos).
Un enfoque humano del papel del CEO
La crisis de la COVID-19 es, sobre todo, una gran crisis humanitaria a nivel universal. Y los CEOs han sido conscientes de ello desde el primer momento. Un 39% de los encuestado ha sufrido de cerca la COVID-19: ellos o algún familiar han padecido la enfermedad. En este grupo, el 55% introdujo cambios en la estrategia diseñada para afrontar la pandemia debido a esta experiencia. El informe de KPMG concluye que, en general, la empatía y la humanidad han sido fundamentales a la hora de tomar decisiones.
En este sentido, una cifra realmente impresionante es que el 79% de los entrevistados afirman que han redefinido el propósito de sus compañías, preguntándose si realmente responde a la demanda social. Y eso son buenas noticias: la transformación es digital, pero también de valores y responsabilidad. En momentos de crisis y cambio, los líderes son conscientes de su contribución para construir una sociedad mejor.
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