Instagram ha anunciado a través de un comunicado que los mensajes de odio e intimidación tendrán consecuencias más duras, llegando a ser deshabilitadas las cuentas de los infractores reincidentes con tal de proteger al resto de usuarios de este tipo de mensajes.
La red social afirma que quiere que Instagram sea un lugar donde «los usuarios conecten con otras personas y el contenido que les gusta». No obstante, son conscientes de que, al igual que en el mundo real, «siempre habrá quienes abusen de los demás«.
De esta forma, la plataforma está endureciendo su postura sobre el discurso de odio en los mensajes directos entre usuarios. Instagram anunció que comenzará a deshabilitar las cuentas de los usuarios que envíen mensajes de odio repetidamente. Aquellos que cometan la infracción por primera vez no podrán enviar mensajes durante un período de tiempo indefinido, pero si vuelven a enviar mensajes de odio, su cuenta terminará inhabilitándose.
«También deshabilitaremos las nuevas cuentas creadas para eludir nuestras restricciones de mensajería», afirma Instagram en su anuncio, «y continuaremos deshabilitando las cuentas que encontremos que se crean únicamente para enviar mensajes abusivos«.
La postura de Instagram sobre la incitación al odio
La política contra la incitación al odio de Instagram prohíbe los ataques a personas en función de características como la raza o la religión, así como las «formas más implícitas de incitación al odio», como el contenido relacionado con el «blackface» y los mensajes antisemitas. Instagram afirma que también coopera con las fuerzas del orden cuando es necesario para ayudar en casos de incitación al odio.
De acuerdo a lo transmitido en su comunicado, Instagram asegura que toman medidas cada vez que detectan mensajes de odio y mejoran continuamente sus herramientas de detección para poder dar con ellos más rápido. «Entre julio y septiembre del año pasado», informan, «tomamos medidas sobre 6,5 millones de discursos de incitación al odio en Instagram, incluidos los mensajes directos, el 95% de los cuales encontramos antes de que alguien lo reportase».
Según indica The Verge, esta actualización de los procesos de incitación al odio surge a raíz de un suceso en Reino Unido, donde algunos futbolistas fueron blanco de abusos racistas en Instagram tras perder un partido. El príncipe William, quien también es presidente de la Asociación de Fútbol de Inglaterra, emitió un comunicado sobre lo ocurrido en el que decía que «el abuso racista, ya sea en la cancha, en las gradas o en las redes sociales, es despreciable y debe detenerse ahora».
No obstante, el hecho de que estos incidentes hayan ocurrido en los mensajes directos complica las cosas, tal y como apunta Instagram: «Debido a que los mensajes directos están pensados para conversaciones privadas, no usamos nuestra tecnología para detectar de manera proactiva contenido como incitación al odio o intimidación de la misma forma que lo hacemos en otros lugares. Pero aún hay más medidas que podemos tomar para ayudar a prevenir este tipo de comportamiento«.
Herramientas para protegernos de los mensajes de odio
En lo referente a los comentarios, Instagram cuenta con una serie de herramientas que pueden ayudar a los usuarios a protegerse. Se pueden usar filtros de comentarios para evitar que otros dejen mensajes ofensivos que usen palabras, frases o emojis que los usuarios no quieren ver.
En cuanto a los mensajes privados, las cuentas comerciales y de creadores tienen la opción de desactivar los mensajes directos de las personas que no siguen, ya que tienden a recibir un mayor volumen de mensajes. Además, han comenzado a implementar estos controles en cuentas personales en varios países, y esperan que pronto estén disponibles para todos.
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