La historia de TikTok y Estados Unidos continúa, amigas y amigos. En este último golpe a los esfuerzos de la Casa Blanca para prohibir la app china, un grupo de celebridades de TikTok ha ganado una orden judicial contra la Orden Ejecutiva de la administración Trump, que podría haber prohibido la app en los Estados Unidos el 12 de noviembre. Con esto, ya no habría margen de tiempo para cualquier acción que suspendiese o prohibiese TikTok en el mercado estadounidense.
Una historia que podría ganar un Oscar
Recapitulando todo lo ocurrido en esta larga historia: el 6 de agosto, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, emitió dos órdenes ejecutivas con las que trató de prohibir el uso de las apps TikTok y WeChat en los Estados Unidos. Si en los 45 días posteriores a la firma no eran adquiridas por una empresa estadounidense, se les prohibiría operar en los Estados Unidos.
El 19 de septiembre, un día antes de que TikTok fuese finalmente prohibida, la empresa matriz ByteDance anunció sus negociaciones con las empresas estadounidenses Oracle y Walmart, que comprarían las operaciones de TikTok en los Estados Unidos, teniendo así el beneplácito del propio Trump. Tras esto, se prorrogó el tiempo hasta el 27 de septiembre, fecha tras la cual la app sería prohibida.
WeChat impugnó la Orden Ejecutiva de la Casa Blanca en un tribunal estadounidense, ganando finalmente. Tras esto, la app está totalmente disponible en los Estados Unidos, a la espera de una nueva audiencia.
El 27 de septiembre, horas antes de que la nueva prohibición entrara en vigor, TikTok ganó un recurso contra la Casa Blanca, citando el caso WeChat como precedente, lo que significaba que también evitaría la prohibición.
El tribunal estableció entonces la fecha del 4 de noviembre para la audiencia que seguiría el caso de TikTok, aunque la empresa tendría aun hasta el 12 de noviembre para finalizar su venta a una compañía con sede en Estados Unidos, enfrentándose, si no, a una prohibición completa en los Estados Unidos.
Salvados… de momento
Según el testimonio de tres creadores de contenido, Douglas Marland, Alec Chambers y Cosette Rinab (que suman más de 7 millones de seguidores en la app), la prohibición de TikTok les quitaría su forma de ganarse la vida, así como también la de muchas otras personas y marcas que deben su sustento al dinero que ingresan gracias a la publicidad en TikTok (algo parecido a lo que la propia compañía expresó en su día).
La jueza del Tribunal Federal de Pensilvania, Wendy Beetlestone, falló finalmente a favor de los tres creadores de contenido, dejando así la Orden Ejecutiva original en el limbo.
La Jefa Global Interina de TikTok, Vanessa Pappas, publicó esta respuesta al caso: «Estamos profundamente conmovidos por el gran apoyo de nuestros creadores de contenido, que han trabajado para proteger sus derechos de expresión, sus carreras y ayudar a las pequeñas empresas, especialmente durante la pandemia. Respaldamos a nuestra comunidad mientras se hacen escuchar, y estamos comprometidos a continuar dándoles un hogar para que lo hagan».
Aun así, TikTok no estaría a salvo del todo. Como se señaló, el juez federal de Washington Carl Nichols fijó la fecha de la nueva audiencia para el 4 de noviembre, para que el gobierno de los Estados Unidos vuelva a exponer su caso sobre la propuesta de prohibición de las transacciones con la aplicación, debido a sus supuestas conexiones con el gobierno chino. De esta forma, el gobierno estadounidense aun podría apelar las conclusiones y tratar de seguir adelante con la prohibición original de TikTok.
Pero el momento en el que se produce es clave. Las elecciones estadounidenses son justo mañana, día 3 de noviembre, y dependiendo del resultado, la presión contra TikTok de la Casa Blanca podría ser muy diferente el 4 de noviembre.
Si Donald Trump ganara mañana, tal vez la presión para echar a TikTok de los Estados Unidos sería aun mayor. Algo que afectaría muy negativamente los negocios de la compañía, que hace pocos días se asoció con la empresa Shopify para vender productos a través de su app. La empresa también se enfrentó recientemente a una prohibición en Pakistán, aunque esta afortunadamente se levantó a los 10 días de entrar en vigor.