En un movimiento bastante llamativo, Facebook emitió el pasado viernes una suerte de «reprimenda» oficial a las afirmaciones hechas en ‘El Dilema de las Redes’, el nuevo documental de Netflix que tiene como objetivo proporcionar una visión general de las diversas formas en que las redes sociales se han vuelto cada vez más divisivas y peligrosas a medida que su uso ha aumentado con el tiempo.
La mayoría de las reseñas de The Social Dilemma, su título original, han sido muy críticas, señalando que a pesar de que realiza ciertas valoraciones válidas e importantes, su mensaje queda mancillado por el sensacionalismo.
Algo que ha llegado a preocupar a la propia Facebook. La red social de Mark Zuckerberg, de la que hace unos días hablamos debido a la eliminación de su regla del 20%, normalmente suele dejar pasar este tipo de críticas, pero, tras conocerse que muchos usuarios han considerado eliminar sus cuentas de Facebook e Instagram después de ver el documental, la compañía ha sentido la necesidad de emitir un comunicado de dos páginas y siete puntos como respuesta a sus puntos centrales.
Facebook responde a las críticas
Las respuestas de Facebook a los puntos significativos del documental no nos pillan de sorpresa:
- Respecto a la adicción a las redes sociales: «Priorizamos las interacciones sociales significativas».
- Respecto a las personas como el producto: «No vendemos su información a nadie».
- Respecto a los algoritmos: «Retratar los algoritmos como «locos» puede servir de alimento para los documentales conspirativos, pero la realidad es mucho menos entretenida».
- Sobre el uso de datos: «A pesar de lo que sugiere la película, tenemos políticas que prohíben a las empresas enviarnos datos confidenciales sobre las personas».
- Sobre la polarización: «La abrumadora mayoría del contenido que la gente ve en Facebook no es polarizador o incluso político».
- Sobre la interferencia electoral: «La película deja fuera lo que hemos hecho desde 2016 (cuando ocurrió la polémica de Cambridge Analytica) para construir fuertes defensas con la intención de evitar que la gente use Facebook para interferir en las elecciones».
- Sobre la desinformación: «La idea de que permitimos que la desinformación se afiance en nuestra plataforma, o que de alguna manera nos beneficiamos de este contenido, está equivocada».
Facebook ya ha compartido sus opiniones sobre todos estos temas en el pasado, por lo que no hay nada nuevo en sus respuestas. La única sorpresa es que Facebook haya sentido la necesidad de dar una respuesta oficial, algo que, seguramente, dará pie a que más gente vea el documental.
Este paso de la compañía puede deberse al significativo número de usuarios que han desactivado recientemente sus cuentas o que han mostrado en redes sociales (incluida Facebook) su intención de hacerlo, lo que ha llevado a su equipo de relaciones públicas a tomar medidas. Una respuesta un tanto cuestionable, puesto que la empresa podría haber optado por hacer mutis por el foro como en anteriores ocasiones y dejar que la polémica se apagara por sí sola con el paso de los días.
Facebook, un imán de polémicas
Esta red social no está exenta de polémicas. Si bien hace unos días comentábamos la eliminación de varios anuncios de la campaña de Trump en su plataforma por hacer declaraciones engañosas sobre los refugiados, la imagen que los usuarios tienen sobre Facebook es muy distinta, mostrando continuamente su interés por borrar sus cuentas en esta red social debido a su supuesto poco interés por pararle los pies a la extrema derecha.
Algo de lo que justo hace un mes alertaba en su carta de renuncia Ashok Chandwaney, un ingeniero de 28 años que trabajó en el área de software de la compañía durante 5 años: «Estoy renunciando porque ya no soporto estar contribuyendo a una organización que se está beneficiando del odio en Estados Unidos y a nivel mundial».
