La Autoridad de Competencia y Mercados de Reino Unido (o CMA) está investigando la compra por un total de 400 millones de dólares de Giphy, una plataforma online para buscar imágenes animadas en formato GIF, por Facebook en el pasado año, tras surgir nuevas preocupaciones en materia de competencia relacionadas con la publicidad digital.
Según informa TechCrunch, la autoridad reguladora, que tiene hasta el 15 de septiembre para investigar e informar sobre este asunto, echó un primer vistazo al trato el verano pasado y, tras una reciente lectura, la CMA expresó sus preocupaciones hace dos semanas, diciendo que la adquisición (ya completada) por parte de Facebook de Giphy podría reducir aún más la competencia en el mercado de la publicidad digital, donde la primera es uno de los principales nombres, con más del 50% cuota del mercado de la publicidad gráfica.
La fusión podría acarrear peligros potenciales para el mercado publicitario digital
La CMA dijo que había encontrado evidencias de que, antes de la adquisición, Giphy planeó expandir sus propias asociaciones de publicidad digital a otros países, incluido el Reino Unido: «Si Giphy y Facebook permanecen fusionadas, Giphy podría tener menos incentivos para expandir su publicidad digital, lo que provocaría una pérdida de competencia potencial en este mercado», escribió hace un par de semanas.
La CMA también dijo que le preocupaba que un Giphy, propiedad de Facebook, pudiera dañar a sus competidores en el mercado de las redes sociales si el gigante tecnológico tratase de explotar el suministro de imágenes animadas a dichas empresas, o requiriese que las empresas de la competencia se registren en la aplicación en peores términos, por ejemplo, obligándolas a entregar los datos de los usuarios que luego podrían usar para impulsar aún más sus motores de orientación publicitaria, obteniendo aún más poder de mercado.
El 25 de marzo, la autoridad reguladora otorgó a las empresas cinco días para dar explicaciones, ofreciendo propuestas legalmente vinculantes destinadas a disipar las preocupaciones existentes. La investigación de la conocida como fase 2 de la fusión se podría haber evitado si las empresas hubiesen ofrecido concesiones que fueran aceptables para la autoridad reguladora. Al no darse el caso, la CMA anunció hace unos días la remisión de esta fase 2.
«Continuaremos cooperando plenamente con la investigación de la CMA. Esta fusión es buena para la competencia y para los intereses de todos los que usan Giphy y nuestros servicios en el Reino Unido, desde los desarrolladores hasta los proveedores de servicios y los creadores de contenido» declaró un portavoz de Facebook a TechCrunch.
Las grandes tecnológicas podrían enfrentarse a futuras regulaciones en el Reino Unido
Si bien Facebook ya completó la adquisición de Giphy, la investigación de la CMA congela su capacidad para terminar de integrar a Giphy dentro de las plataformas. Aunque, dada la posición dominante de Facebook en el espacio publicitario digital, su necesidad empresarial de moverse rápidamente mediante la innovación de productos es mucho menos urgente que en años anteriores, cuando estaba desarrollando su dominio del mercado sin que existieran intervenciones regulatorias.
En los últimos años, la CMA ha prestado especial atención al mercado de la publicidad digital. En 2019, la autoridad reguladora informó sobre importantes preocupaciones acerca del poder del duopolio tecnológico de Facebook y Google, y comenzó a investigar a esta última a principios de enero por su nueva política de cookies. Aunque en su informe final dijo que esperaría a que el gobierno británico creara nuevas leyes en vez de realizar una intervención para abordar los desequilibrios de poder de mercado.
El Reino Unido está ahora en el proceso de establecer un nuevo órgano regulador a favor de la competencia con un enfoque dedicado a las grandes tecnologías, en respuesta a las preocupaciones sobre la dinámica absorbente en los mercados digitales, en los que «el ganador se lleva todo». Esta nueva unidad de mercado digital supervisará un régimen «procompetencia» para las plataformas de Internet, que se enfrentarán a nuevos requisitos para seguir realizando sus funciones en el país.
