Hace casi un año, supimos que Internet Explorer tenía los días contados. Microsoft anunció que su navegador desaparecería el 15 de junio de 2022. Pues bien, con esa fecha cada vez más próxima, la compañía ha aprovechado para recordárnoslo y de paso ofrecer una serie de consejos a los usuarios que aún lo utilizan para que se preparen a tiempo.
La muerte del veterano navegador responde a una intencionalidad clara que podría resumirse con la frase “a rey muerto, rey puesto”. Microsoft quiere centrarse en Edge, basado en Chromium y mucho más apropiado para los tiempos que corren. Y es que, a pesar de su antigüedad, Internet Explorer ha tenido que enfrentarse a duros competidores más jóvenes, como Google Chrome y Firefox, que suelen ser más populares entre los usuarios. Por eso, quieren ofrecer un producto a la altura, mucho más moderno y eficaz en términos de rendimiento y seguridad.
Como comentamos, la retirada del navegador no es ninguna sorpresa, pero el gigante tecnológico ha querido refrescarle la memoria a los usuarios para que se preparen con antelación, sobre todo pensando en aquellas empresas que siguen siendo dependientes de él.
“En lugar de esperar, le recomendamos que programe su propia fecha de retiro interna: la mejor manera de prepararse para la inhabilitación de IE después del 15 de junio es retirar IE de manera proactiva en sus organizaciones antes del 15 de junio,” comentan los de Redmond en su comunicado.
Gracias al modo «IE» y a la importación de datos, el proceso será bastante sencillo
Si bien es cierto que esto no supone el fin definitivo de Internet Explorer, ya que seguirá siendo compatible con otras versiones del sistema operativo como Windows 10 LTSC; lo más recomendable es decantarse por Edge, que sí que tiene soporte asegurado para muchos años. De hecho, recordemos que, ya en agosto de 2021, el viejo navegador ya dejó de funcionar con herramientas Microsoft 365 y otras aplicaciones.
Por ello, desde la compañía, hacen una llamada a la acción para aquellas empresas que podrían resultar más afectadas, al contar con aplicaciones o sitios web antiguos que siguen dependiendo de Internet Explorer para funcionar. Como solución, Edge ofrece un modo “IE” que permite simular la misma experiencia y compatibilidad que su predecesor.
Precisamente, la primera recomendación de Microsoft tiene que ver con eso. Alientan a los usuarios a probar dicho modo para identificar cualquier problema de compatibilidad que pudiera surgir antes de la fecha límite: el 15 de junio de 2022.
La intención de la compañía es eliminar los iconos de Internet Explorer tanto del menú de inicio como de la barra de tareas para entonces. Sin embargo, las aplicaciones dependientes de él podrán seguir funcionando en Edge, gracias al modo “IE”. Al pinchar en algún archivo que haga uso del anterior navegador, este se abrirá directamente en Edge. Y lo mismo pasará si los usuarios tratan de abrir el ejecutable iexplore.exe, como afirman en una detallada guía.
Por último, recomiendan que las empresas comuniquen el cambio a sus trabajadores para que puedan importar sus datos de Internet Explorer al nuevo navegador. Se trata de un proceso bastante sencillo. Para ello, simplemente, tienen que acceder a edge://settings/importData en la barra de direcciones, seleccionar “Importar desde” y, posteriormente, “Microsoft Internet Explorer”.
