La plataforma de mensajería móvil WhatsApp se enfrenta a una multa de 225 millones de euros impuesta por la Comisión para la Protección de Datos de Irlanda (DPC, en sus siglas en inglés), la máxima autoridad digital del país, por violar la ley de privacidad de la Unión Europea al no informar a sus usuarios de cómo compartía sus datos con Facebook.
La aplicación propiedad de Facebook ha sido investigada por el DPC irlandés, su supervisor principal de datos en la Unión Europea, desde diciembre de 2018. La investigación que comenzó varios meses después de que se emitieran las primeras quejas hacia WhatsApp sobre cómo procesa los datos de los usuarios según el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), una vez que comenzó a aplicarse en mayo del mismo año. El regulador irlandés tiene competencia en este caso debido a que Facebook tiene su sede europea en Irlanda.
No se cumple el estándar del RGPD
En el comunicado de la DPC se concluye que WhatsApp no cumplió con el estándar requerido por el GDPR, encontrando una serie de infracciones de transparencia que abarcan los artículos 5(1)(a); 12, 13 y 14 de la ley de protección de datos. El organismo irlandés también ordenó a la aplicación propiedad de Facebook que tome una serie de acciones para mejorar el nivel de transparencia que ofrece a los usuarios y no usuarios, dándole un plazo de tres meses para llevar a cabo todos los cambios.
En una declaración en respuesta a la decisión del DPC a la que ha tenido acceso TechCrunch, WhatsApp no se mostró de acuerdo con las infracciones señaladas y calificó la sanción como «completamente desproporcionada«, además de confirmar que apelará, indicando lo siguiente:
«WhatsApp se compromete a brindar un servicio seguro y privado. Hemos trabajado para garantizar que la información que proporcionamos sea transparente y completa y continuaremos haciéndolo. No estamos de acuerdo con la decisión de hoy con respecto a la transparencia que brindamos a los usuarios en 2018 y las sanciones son completamente desproporcionadas. Apelaremos esta decisión«.
Una de las multas más altas
La DPC ya presentó en diciembre de 2020 a varios organismos reguladores comunitarios una decisión preliminar sobre esta cuestión, en la que imponía una multa de 50 millones de euros. Sin embargo, tras recibir las protestas de varias autoridades regulatorias de otros países de la UE, Helen Dixon, la comisaria irlandesa al frente de la DPC, tuvo que elevar cuantiosamente esta propuesta inicial hasta los 225 millones de euros (unos 267 millones de dólares).
De acuerdo a lo indicado por El País, la multa impuesta a WhatsApp es la más cuantiosa expedida por la DPC y una de las más altas en la Unión Europea en relación con el cumplimiento del RGPD. La Comisión Nacional para la Protección de Datos (CNPD) de Luxemburgo sancionó a Amazon con 746 millones de euros el pasado mes de julio al considerar que la plataforma de comercio electrónico incumplió el RGPD.
El alcance de la investigación de DPC que se ha anunciado, se limitó a considerar solo las obligaciones en cuanto a transparencia de WhatsApp. La transparencia es un principio clave del reglamento, y si bien una brecha de seguridad puede indicar una práctica descuidada, la opacidad sistemática hacia los usuarios en cuyos datos se basa su «imperio adtech» para obtener ganancias parece algo deliberado.
Al menos en Europa, las empresas que basan sus negocios en los datos de los usuarios se verán obligadas a ser francas sobre lo que están haciendo con la información que recopilan de sus comunidades. Sin embargo, el caso de WhatsApp también reavivará el debate sobre si el RGPD está funcionando de forma eficaz donde más cuenta: frente a las empresas más poderosas del mundo, que también son, por supuesto, empresas de Internet.
Imagen de Alfredo Rivera en Pixabay.
