Google ha despedido a la Dra. Margaret Mitchell, colíder y fundadora del equipo de I.A. ética de la compañía, alegando que la científica violó en repetidas ocasiones el código de comportamiento de la empresa. El despido se produce dos meses después de la salida de la otra responsable del departamento, la doctora Dra. Timnit Gebru. Ambas investigadoras habían denunciado la escasa diversidad en los departamentos de investigación de Google y la supuesta censura de investigaciones críticas con los productos de la compañía.
Ha sido la propia Margaret Mitchell quien ha anunciado el despido en su cuenta de Twitter. Por su parte, Google ha manifestado en un comunicado al medio TechCruch sus motivos para tomar esta decisión: «Después de realizar una revisión de la conducta de esta gerente, confirmamos que hubo múltiples violaciones de nuestro código de conducta y de nuestras políticas de seguridad, que incluían la exfiltración de documentos confidenciales sensibles al negocio y datos privados de otros empleados».
El final esperado a un conflicto interno
Que la situación de Mitchell en la compañía era inestable era algo evidente desde la salida de su compañera Timni Gebru. Ambas científicas habían sido los flamantes fichajes para dirigir el departamento de I.A. ética de la compañía, y desde luego ejercieron su trabajo con actitud crítica: las dos habían reclamado abiertamente más diversidad e inclusión en los equipos de investigación de Google, además de asegurar que la compañía censuraba estudios críticos con sus productos.
El despido se produce dos meses después de la salida de Gebru. Google aseguró que se trataba de una decisión de su empleada, pero Gebru afirmó que era un despido. La salida de Gebru fue en general recibida con malestar por los empleados de Google, y Mitchell fue enormemente crítica con la decisión. En enero Google ya cortó el acceso de Mitchell a su correo corporativo, acusándola de usar scripts automatizados para buscar rastros de maltrato a Gebru por parte de la compañía.
A principios de febrero, Mitchell publicó un correo electrónico que, según ella, había enviado al equipo de prensa de Google el día que perdió el acceso a su cuenta de correo. En el mensaje, durísimo, la investigadora culpaba a Google de maltrato a Gebru y aseguraba que el despido de su compañera «estaba alimentado por los mismos fundamentos de racismo y sexismo que nuestros sistemas de inteligencia artificial, cuando están en las manos equivocadas, tienden a absorber». La propia Mitchell hizo público su texto, que se puede leer en este enlace.
Inteligencia Artificial: esperanza y miedo
El pasado día 18 de febrero, Google anunció el nombramiento de la Dra. Marian Croak como su nueva directora de Inteligencia Artificial, con lo que tendrá a su cargo, entre otras, la división de I.A. ética.
Google pone así fin a la crisis, pero la salida por la puerta de atrás de dos expertas fichadas ante el temor de que la Inteligencia Artificial pueda potenciar sesgos y ahondar en desigualdades sociales no resulta tranquilizadora. Mientras tanto, crecen las voces que reclaman una implantación ética de la que está llamada a ser la tecnología más revolucionaria de las próximas décadas.
